En
el año 1929 en un espacio que se encuentra a mitad de camino entre la actual
localidad de Cervantes y la estación Padre Alejandro Stefenelli, hubo un
intento por crear un nuevo pueblo. Este se ubicaría más exactamente en el límite
de Cervantes y lo que se conoce como Colonia Rusa. ¿Que pasó?
Se
promocionó este nuevo emprendimiento a través de afiches que impulsaban la
compra y mostraba inclusive la traza y características que tendría el nuevo
pueblo cuyas tierras pertenecían a Pablo Serú.
Como
ha sido casi una constante en la región, uno de los principales ejes de
progreso en cada asentamiento de población fue el tren. En este sentido es que
el propietario de los lotes que se ofrecían a la venta, aseguraba que estaba la aprobación para la construcción
de una estación del ferrocarril a la vera del pueblo.
La
verdad es que pasaron los años y el tren nunca se detuvo allí, pues no hubo una
estación para hacerlo y tampoco prosperó el promocionado Pueblo Ministro Serú.
El proyecto